Hildegart Rodríguez Carballeira
El desconocimiento del gran público de la biografía de Hildegart Rodríguez Carballeira, es la constatación -una más- del silencio al que, de forma habitual, ha condenado la historia española a sus mujeres más relevantes. Si el olvido de las mujeres que fueron protagonistas fue siempre una costumbre, 40 años de dictadura franquista, profundizó en esta tendencia, creando una cortina de silencio sobre las biografías de mujeres que, como las “sin sombrero” o las maestras republicanas, ganaron espacios de presencia en los ámbitos profesionales, académicos o políticos durante las tres primeras décadas del SXX.
Nada en la biografía de Hildegart es convencional. Es concebida por su madre, Aurora Rodríguez Carballeira, como un proyecto personal, con el objeto de convertirla en “un modelo de mujer del futuro”. Su madre, en tiempos en los que no existía la fecundación asistida, elige a su padre con criterios de preminencia biológica e intelectual. Sólo le deja visitar a la pequeña hasta los 4 años. A partir de ese momento, no volverá a tener contacto con madre e hija. Hildegart nace en Madrid el 9 de diciembre de 1914.
Pronto destacó en lo académico, aprendiendo a leer a los 2 años, escribir a los 3, y manejarse con fluidez en varios idiomas a los 7. Su capacidad de aprendizaje la convirtió rápidamente en una niña prodigio, exhibida en los periódicos y revistas de la época, con el consiguiente orgullo de su madre, que veía como su gran proyecto, alcanzaba el reconocimiento público.
Se licenció en Derecho antes de cumplir los 18 años, convirtiéndose en la abogada más joven de España. Comenzó las carreras de Filosofía y Medicina, que no pudo terminar antes de su temprana muerte. A los 14 años, ya era una renombrada columnista en medios y revistas de primer nivel. Siguiendo los planes que su madre había reservado para ella, se afilió (o fue afiliada) al PSOE, donde llega a ocupar la vicepresidencia de sus juventudes. Desencantada con la política socialista en el primer bienio de la II República -entre otros puntos, por la tibieza del partido en el asunto religioso-, abandona su militancia socialista y abraza las tesis del extremismo republicano, dentro de las filas del Partido Republicano Democrático Federal.
Escribió y publicó 15 libros en materias como la sexología, filosofía y política. Mantuvo relación académica y epistolar con Magnus Hirschfeld, H.G. Wells, José Ortega y Gasset, Juan Negrín o Gregorio Marañón, que apreciaban y glosaban sus trabajos. Fruto de la relación con este último comienza a trabajar en la Liga Mundial para la Reforma Sexual. Todo este apabullante currículum, corresponde a los 18 primeros años de la vida de Hildegart. A esa edad, la niña prodigio, el proyecto de una madre que había volcado su vida en su educación, comienza poco a poco a tomar sus propias decisiones. Empieza a ejercer la libertad de los adultos, iniciando relaciones de noviazgo no aceptadas por su madre, o priorizando sus propias ideas, que muchas veces le alejaban del plan trazado por su progenitora. El 9 de junio de 1933, mientras Hildegart dormía, Aurora Rodríguez disparó tres tiros de pistola en la cabeza y uno en el corazón de su hija de 19 años, posiblemente obsesionada por evitar que abandonase el plan que para ella había trazado.
Hildegart Rodríguez Carballeira fue miembro de la logia de Adopción Amor de Madrid desde 1931 hasta su muerte. Trabajó en el nombre simbólico de Iris-Egle alcanzando el 4º del REAA.